En un mundo obsesionado con el rendimiento y la optimización, la Serenidad emerge como una valiosa propuesta filosófica para contrarrestar la ansiedad y la insatisfacción crónica.
En un mundo obsesionado con el rendimiento y la optimización, la Serenidad emerge como una valiosa propuesta filosófica para contrarrestar la ansiedad y la insatisfacción crónica.
En la actualidad, el “borramiento” del cuerpo físico nos lleva a reflexionar nuestras maneras de existir más allá de aquellas interacciones donde todas las personas implicadas se relacionan desde la presencialidad, es decir, desde la materialidad.