Este es un espacio de contenido filosófico donde fermentamos nuestras ideas, las dejamos leudar y las alimentamos con las levaduras y bacterias de nuestra cotidianidad. Es a través de este proceso químico y de simbiosis que posibilitamos la ampliación de nuestros horizontes –efervescentes, burbujeantes, expansivos.

Cuando se origina una masa madre, las levaduras y las bacterias del medio son cruciales para su conformación. Estos organismos salvajes sobreviven en conjunto para prosperar. Cada masa madre es coyuntural a su tiempo; pero como el tiempo, también transita el mundo. La masa madre tiene memoria; es un organismo vivo y en transformación constante.

Encontramos en este proceso orgánico de crecimiento y expansión, una analogía con nuestra práctica. Las narraciones de esta panadería –ensayos, prosas, poesías, críticas, guiones, escritos y pronunciados– también se nutren de nuestras experiencias de lo cotidiano, contingentes, particulares, propias. Es a través de estos relatos que reconocemos la transversalidad filosófica que nos rodea, sus movimientos, sus cambios, sus expansiones y contracciones.

Queremos cultivar una masa madre de ideas y de prácticas que podamos compartir con otras personas, interesadas también en la filosofía y su aplicación. Es por ello que nos encontramos cultivando nuestra masa y te damos la bienvenida a este espacio de encuentro e intercambio filosófico.

¡Buen provecho!